Uno de los grandes desafíos de cualquier persona, si no el más grande, es formar una familia y organizarte el día a día con toda la complejidad, cambios profundos y esfuerzo que implican.
Es el típico asunto que desconoces hasta que te toca. Hasta los 30 todo es «libertad financiera» y este tipo de cosas. Pero según avanza la vida, esta se hace más compleja.
Hoy en día parece es una odisea tener hijos (uno o dos, tres o más es de superhéroes), ser independientes y a la vez seguir desarrollando una carrera profesional. Dificilísimo.
Además esto implica algo a lo que no estamos acostumbrados; la renuncia. Los nacidos en los ochenta hacia adelante somos una generación esencialmente egoísta. Pero hay vida más allá de nosotros mismos, algo que solemos descubrir, por lo general, un poco tarde.
Y esto tiene un impacto a nivel financiero. Al final, el balance y cuenta de resultados de una persona te dice cómo es y cómo actúa, de la mimsa forma en que un texto escrito o una conversación te da pistas sobre cómo está ordenada la cabeza del que tienes en frente.
Seguir leyendoMe dedico a hacer la estrategia financiera y control económico de pymes tech & digital con actividad global que están creciendo (CFO Externo).
También traduzco a números ideas e iniciativas para que sus CEOs tomen decisiones con mayor certidumbre.